Izquierdas y Derechas contra AMLO/morena
morena no es un partido anticapitalista, ni siquiera es antisistema.
Andrés Manuel López Obrador no es Comunista ni siquiera es Socialista y tal vez
ni siquiera sea socialdemócrata. El problema con las categorías políticas que
califican o pretenden calificar a morena y a López Obrador, es que se trata de
categorías bastante mal comprendidas y pésimamente explicadas, en ello juegan
un papel importante los medios de comunicación masiva, desde la prensa escrita
pasando por la radio y la televisión hasta el internet y las redes sociales.
Por ejemplo, cuando se dice algo del Comunismo, normalmente
se le asocia con dictadura y represión, se pone como ejemplo de ello al
gobierno de José Stalin en la Unión Soviética. También suele ponerse como
ejemplo a Cuba y Fidel Castro o a China y al Partido Comunista Chino, etc. Sin
embargo, el Comunismo no es ni dictadura ni represión. Dictadura y represión son
términos que el Capitalismo dice de él (del Comunismo), pero eso no es el
Comunismo. Como su nombre lo indica, Comunismo hace referencia a lo común y
está ligado necesariamente a lo esencial del ser humano.
¿Cuál es entonces la caracterización correcta de morena y
López Obrador? Depende del punto de vista desde el cuál pretenda hacerse. Así,
para un (neo) liberal, Andrés Manuel López Obrador es un populista; en tanto
que para un comunista, AMLO es un liberal-burgués. También se le ha calificado
de nacionalista, de reaccionario, de reformista, de pequeñoburgués, de
socialdemócrata, etc., etc… Lo que es común a todas esas calificaciones es su
sentido negativo; no pretenden hacer una descripción política de Andrés Manuel
ni un análisis serio de morena como partido político, simplemente buscan
deslegitimar, desacreditar y restar potencial al proyecto político que
representan, muchas veces haciendo uso abusivo de diatribas insostenibles e
incluso ataques personales o viles falacias ad
hominem.
Si de verdad quiere hacerse una caracterización adecuada de
Andrés Manuel López Obrador y morena, no bastará con ceñirse a los documentos básicos del partido los que sólo constituyen una guía. Lo que debe hacerse es
mirar a los hechos, a la conducta tanto de López Obrador como de los militantes
y cuadros de morena, de allí que sea importante para los enemigos de AMLO
vigilar hasta en la intimidad a todo aquel que adhiera o simpatice con la causa
de morena. En ésta tarea de falsa moral o doble moral se omite información
relevante o se tergiversa con tal de lograr el objetivo común: deslegitimar,
desacreditar y restar potencial al proyecto político de AMLO/morena.
Un mecanismo sencillo, pero poderoso para desmontar las
falsas críticas contra AMLO/morena es mirar a quién hace la “crítica”, cómo la
hace y para qué la hace. Añadan a eso la trayectoria del enunciante en el mismo
campo, es decir, ¿cuál es su papel en el campo político? Así, no sorprende que
gente del PRI, del PAN y del PRD “critiquen” a López Obrador y a morena; lo que
sorprende es que incluso los potenciales aliados del proyecto político
contribuyan con el objetivo común de división y dispersión de fuerza en lugar
de buscar alianzas tácticas con miras a la consecución de una hegemonía
estratégica que sin duda facilitará la instauración de condiciones objetivas propicias
para aspirar a un objetivo superior.
Mientras tanto se abre la posibilidad de un nuevo triunfo
electoral de Andrés Manuel López Obrador, el cual no será posible sin una masiva
participación aunada a un robusta organización y no simplemente en el plano
electoral (función que cumplirá morena) sino además y sobre todo en el plano
cívico-político-social función que necesariamente deben cumplir los movimientos
sociales y ciudadanos en general. Es obvio que México se encuentra lejos de una
Revolución Socialista o siquiera Popular-Democrática, pero sin la alternativa
factible de AMLO/morena, estaremos más cercanos a un inevitable/indeseable
Estallido Social que lejos de construir acelerará la actual tendencia
destructiva.
Antonio Degante
02/08/2015
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